Período de tiempo en el cual todos los factores de producción son variables. A diferencia del corto plazo, las empresas pueden ajustar tanto los insumos variables como los fijos, por ejemplo: modificar el tamaño de planta, invertir en nueva tecnología, o cambiar el nivel de capital.
Fuente:
Mankiw, N. G. (2021). Principios de economía. 8.ª ed. Cengage Learning.